Un informe de Circana alerta sobre el bajo porcentaje de compradores entre los jugadores de 18 a 24 años.
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El precio de las consolas y servicios relacionados sigue subiendo, y con ello aparecen datos que pueden resultar preocupantes para las grandes compañías del sector. Según estadísticas recientes compartidas por el analista Mat Piscatella, de Circana (antes NPD Group), los jóvenes de entre 18 y 24 años apenas están comprando consolas como Xbox Series, PlayStation 5 o Nintendo Switch 2.
El informe señala que este grupo de edad solo representó un 3% de las compras de hardware en Estados Unidos durante los últimos 12 meses, frente al 10% que suponían en 2022. En contraste, los hogares con ingresos superiores a los 100.000 dólares anuales concentran ya el 43% de las compras, frente al 36% de hace unos años.
Un reto para el futuro de Xbox y PlayStation
El problema no es menor. Si los jóvenes no acceden a estas plataformas ahora, resulta poco probable que lo hagan cuando tengan 20 o 30 años, según advierte Piscatella citando a GamesIndustry.biz. En otras palabras, el relevo generacional en la base de usuarios podría verse comprometido si los precios siguen alejando a los compradores más jóvenes.
Esto no solo afecta a la venta de consolas, sino también al consumo de servicios como Xbox Game Pass, PlayStation Plus o Nintendo Switch Online. El riesgo es que el crecimiento de la industria quede cada vez más ligado a un perfil de jugador con alto poder adquisitivo, en lugar de atraer a nuevas generaciones.
El análisis de Circana se convierte así en una señal de alerta para la estrategia de futuro de las grandes marcas. Si Xbox y PlayStation quieren seguir siendo relevantes para los jóvenes, quizá necesiten replantear políticas de precios o buscar nuevas fórmulas que faciliten el acceso a su hardware y servicios.

